Ayer, abotargada por tanto ruido, decidí salir de mi casa. Paseé por el río y vi algo brillar entre la tierrra, como una luciérnaga o algo así. Muerta de curiosiad, bajé, a riesgo de caerme por un precipio. Escarbé y me di cuenta de que era una botella. Era verde, limpísima a pesar de su escondite. Sonreí y pensé, "esto sólo pasa en las películas pero voy a mirar". La descolché y ¡¡¡¡Sorpresa!!!, sí había un mensaje:
"No hay horas más vivas que las horas muertas que pasé contigo"
Y me lo metí en el bolsillo.
3 comentarios:
Es cursi, lo sé, pero los cursis también tenemos derecho a publicar, no?
Consejo: el empalague se va con agua
jajajajajajajajajaja
por un momento has conseguido que quiera creer que era cierto.
a mi me llegó un sms que decía "no esperaba menos de ti". el viernes me confesaron la autoría, venía desde París. :)
QUE PO-TI-TO!
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