sábado, 23 de octubre de 2010

La tierra resucita sobre los muertos al mismo tiempo que la herimos con nuestro peso, TIC, TAC, sienten los gusanos que se alimentan de los muertos… y yo, PAM, PAM, PAM… y tú viniendo hacia mí, PUM, PUM…PUM, PUM latiendo el corazón punzante de mis miedos… te toco, me tocas, seda más seda, pupila erizada, AYY, suspiramos, y un chorro de aire se expande… ¿Nos vamos? TIC, PUM, PAM, TIC, PUM,PUM, PAM, TIC… y la tierra resucita sin los muertos.

miércoles, 22 de septiembre de 2010

Los aguijones de la historia caen fulminados en este costillar metálico. Aguijón con púa luchan a muerte, punta con punta, a tacón clavado en las víceras de cielo y cuerpo. La luna sangra plumas de carbón, de la carne manan archipiélagos verdes de esperanza enmohecida. Punta con punta a talón descalzo pugnan sin ojeras. Ojerizas. R.I.P. La memoria ha fallecido, desfallecida ¡¿Dónde están?! ¿Dónde están las alas enterradas? ¿Dónde están los impulsos del órgano latente? Solo punta con punta clavadas sobre púa desarraigada. Tú. Yo. Pronombre, prohombre, nada. Hecatombe universal, lunática y desertada: papeles cenicientos, enjugando aguijón y costilla, multiplican los colores. Arcoiris bancario de punta a punta perfectamente calzados. Noche blanca de paz...noche roja de amor, con Coca Cola, a la espera de invitación.

miércoles, 25 de agosto de 2010

Estoy de vuelta

No sé si estoy lo va a leer alguien ya,después de tanto tiempo sin escribir, aquí, además, desde hace un tiempo las veces que he escrito ha sido muy esporádicamente;así que no sé si esto llegará a alguien, pero por si acaso yo me explico, ante quien haya tenido algún interés por lo que que dijera pero también ante mí. Durante los últimos meses he pensado cerrar el blog y crear otro o incluso dejar de escribir. Tuve la tentación de dejarlo al dudar si la que empezó con esto seguía siendo la misma persona y si no lo era, lo justo con la anterior era no mezclarlas, para no traicionar a la constructiva y no avergonzar a la destructiva, sin embargo, caí en la cuenta de que aún mantengo uno de mis principios fundamentales, vitales y estéticos: la coherencia es una entelequia a la que me niego a aspirar. Partiendo de aquí, no tengo ningún inconveniente en mezclar a la destructiva con la constructiva porque, del mismo modo que la incoherencia es mi única coherencia, las otras dos también forman parte del mismo todo, del mismo fin, de los mismos fines. Es por eso que empezaré siendo otra que será la misma, la que bascula sus miedos y sus afanes con letras, sin remedio; porque puede que sean buenas, malas, tal vez mediocres, pero a su vez son, y lo digo con toda seguridad, irremediables.
Así que, si alguien está ahí, bienvenid@ a lo que sea que vaya a ser

Praxis


Frenesí frenético
neorósis apuntalada:dos balcones y un cochero
Taciturno
Opulento
Un bufido se desgrana...vespertina voluptuosidad
Plenilunio...estuario fosilizado
silicio, estroncio, cadmio, mañana atonlondrada?
y marfil
Profilaxis perversa...lazo apolillado...
la llegada de los turistas a nuestro país...
-¿Qué?
digo que pan con pan, miel sobre espuelas
-¿Ladras?
- Para mí que...
hipontensa
-¿Qué?
- biblioteca
Ah, hipoteca
-sí,sí, bibliotensa
Bismuto
Es lunes

martes, 30 de marzo de 2010

El amor es un reo de muerte:
no es el alma la cárcel
ni tampoco el cuerpo,
es el tiempo, que se es escapa de tan eterno
Me espanto porque me muero y
me muero porque me espanto
de ver tus ojos en la espiga seca,
parda por humildad,
brillante tu mirada por necesidad;
y entre la espiga y el cielo,
mar redondo de paralela techumbre
e inmisericorde mansedumbre.

Tú y yo estamos bajo el mismo techo:
tú buscas trigo en la arena,
yo un adversario
cuyo ocaso reverdezca nuestras eras,
sin pálido grano que mutile tus niñas refulgentes.
Brillo verde por ser verde

Tú buscas y encuentras, aunque sea árido el desubrimiento,
yo busco y sólo un par de visillos opacos hallo,
con vestigios de gesto inconexos.

Me muero porque me espanto y me espanto porque me muero
de verte a ti aguijoneado y muerto
y a mí,
callada escribiendo.

sábado, 6 de marzo de 2010

Para el lunes

Leer a Borges es vivir en lo exacto:
no hay color, pero en cada verso hay una dimensión.
Profunda.

Su letra sobresale del negro
con una fluorescencia transparente que angustia;
Precisa.

Su página es eminentemente ingrávida,
a menos que te acaricie la frente.
Entonces sí,
entonces sí que gravita y
agrava la ingenuidad de tus espejos.
Clavada,
y tú avergonzada.

Sudas la certidumbre
de que tienes el cráneo
-desde el frontal al occipital,
desde el pariental al temporal-,
lleno de cuentos
y, sin embargo,
todas tus fábulas se quedan en cueros
al lado de sus blancos.
La unidad de lo certero en sombra
frente a la imagen infusa:
Vence la unidad fraccionable.
Orgullosa.

La lógica esta vez sí impone la Razón:
lo exacto fulmina a lo misceláneo

Maravillas de la fonética